Falacia del hombre de paja | Ejemplos y definición
La falacia del hombre de paja es una falacia que consiste en distorsionar el argumento de otra persona para que sea más fácil atacarlo o refutarlo. En lugar de abordar el argumento real del interlocutor, se presenta un argumento similar en parte.
Al poner ese argumento en boca de la otra persona y atacar esa nueva versión, en realidad no se está refutando el razonamiento original, sino uno distinto.
La falacia del hombre de paja puede utilizarse para desviar la atención de argumentos relevantes en diferentes contextos, como en debates políticos, en los medios de comunicación o en conversaciones cotidianas.
La falacia del hombre de paja también se conoce con el nombre de falacia del espantapájaros.
¿Qué es la falacia del hombre de paja?
La falacia del hombre de paja es una forma de falacia lógica o error de razonamiento.
Las falacias son afirmaciones o argumentos que pueden parecer razonables o verdaderos, pero que en realidad son erróneos y, por tanto, pueden ser engañosos.
La falacia del hombre de paja se produce cuando alguien distorsiona el argumento de su oponente, por ejemplo, simplificándolo en exceso o exagerándolo, y luego refuta esta “nueva” versión del argumento (ahora convertido en “argumento del hombre de paja”).
La persona que utiliza el argumento del hombre de paja tiene el objetivo de oponerse al argumento original; pero, para hacerlo, crea una versión distorsionada de la opinión de su interlocutor.
Esta versión es más fácil de rebatir, pero no es la que ha expuesto la otra persona.
La falacia del hombre de paja es una falacia informal. En otras palabras, el problema reside en el contenido del argumento, más que en su estructura (en cuyo caso sería una falacia formal).
En concreto, la falacia del hombre de paja es una falacia de relevancia: estas falacias utilizan pruebas, ejemplos o afirmaciones que son irrelevantes para el argumento en cuestión.
¿Para qué se utiliza la falacia del hombre de paja?
Se suelen utilizar argumentos de paja para desacreditar una postura o teoría con la que no se está de acuerdo.
A veces, se recurre a la falacia del hombre de paja para convertir el argumento de la otra persona en una postura impopular contra la que es fácil reunir partidarios, pues viola las normas sociales.
Afirmar, por ejemplo, que “a los que quieren legalizar las drogas les parece bien que los niños tomen éxtasis y LSD” es una proposición que nadie puede defender.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que cuando las personas incurren en la falacia del hombre de paja no lo hacen necesariamente a propósito. Puede ser que verdaderamente hayan malentendido el argumento de la otra persona.
¿Cuáles son los distintos tipos de falacia del hombre de paja?
La falacia del hombre de paja puede adoptar diferentes formas y puede implicar:
- Sacar de contexto las palabras del interlocutor (es decir, elegir palabras que tergiversen su intención).
- Exagerar o simplificar el argumento del interlocutor y luego atacar esta versión distorsionada.
- Inventar afirmaciones que el interlocutor nunca ha hecho.
- Cambiar detalles pequeños pero importantes del argumento original del interlocutor.
Independientemente de su forma, las falacias del hombre de paja comparten esta estructura general:
- La persona A expone la posición X.
- La persona B describe la posición Y, una versión distorsionada de la posición X.
- La persona B argumenta en contra de Y en lugar de X, y alega que, de esa forma, refuta la posición original.
Ejemplo de falacia del hombre de paja
La “guerra contra la Navidad” es un ejemplo de argumento de paja utilizado por ambos lados del espectro político en Estados Unidos.
Preguntas frecuentes sobre la falacia del hombre de paja
- ¿Cómo se puede responder a la falacia del hombre de paja?
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La mejor manera de responder a una falacia del hombre de paja es llamar la atención sobre la falacia y pedir al interlocutor que demuestre en qué se parecen el argumento original y la versión distorsionada.
Como son diferentes, el interlocutor tendrá que admitir que su argumento no es válido o intentar justificarlo utilizando un razonamiento menos correcto y más fácil de contraatacar.
- ¿Por qué resulta problemática la falacia del hombre de paja?
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La falacia del hombre de paja es problemática en tanto en cuanto no valora el punto de vista del interlocutor.
En su lugar, tergiversa de manera intencionada las ideas del otro, evitando así comprometerse con su argumento.
Por eso, recurrir a la falacia del hombre de paja rebaja el nivel del debate constructivo.
- ¿Cuál es la diferencia entre la falacia del hombre de paja y la falacia de la pista falsa?
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Aunque tanto la falacia del hombre de paja como la falacia de la pista falsa son falacias lógicas o errores de razonamiento, denotan diferentes intentos de “ganar” una discusión. Más concretamente:
- La falacia del hombre de paja consiste en distorsionar deliberadamente el argumento de otra persona. Al simplificarlo o exagerarlo, la otra parte crea un argumento fácil de refutar y luego lo ataca.
- La falacia de la pista falsa se refiere a un intento de cambiar de tema y desviar la atención de la cuestión original. En otras palabras, se introduce en la discusión un argumento aparentemente sólido, pero irrelevante, ya sea a propósito o por error.