Anacoluto | Significado y ejemplos

El anacoluto, a veces también denominado solecismo, es un cambio sintáctico en la estructura de la oración que introduce una inconsistencia.

El anacoluto suele producirse en el lenguaje hablado, pues este es flexible y a veces se reformulan las ideas a la vez que se habla. Esto da lugar a incongruencias, es decir, a faltas de sentido o de lógica.

No obstante, también se puede utilizar el anacoluto como figura literaria para causar sorpresa.

Anacoluto: ejemplos
  • Yo, la verdad es que no me gusta el pescado.

En esta oración hay un anacoluto, pues empieza por el pronombre personal “yo” y después se continúa la oración con el verbo de construcción pronominal “me gusta” (que no admite el pronombre personal sujeto).

  • Yo, la verdad es que no me gusta el pescado.
  • (A mí) la verdad es que no me gusta el pescado.

Los verbos pronominales se construyen con un pronombre que sustituye al sujeto “yo”, por lo que ambos no son posibles.

  • Su amiga, el novio es de Galicia.

En esta oración, el anacoluto se produce porque se comienza la oración con “su amiga” como sujeto.

Sin embargo, acto seguido queda claro que el sujeto real es “el novio” y que “su amiga” debe ser un sintagma preposicional introducido por la preposición “de”.

  • Su amiga, el novio es de Galicia.
  • El novio de su amiga es de Galicia.

Anacoluto: significado

La palabra anacoluto proviene del griego anakólouthon, cuyo significado es “que no sigue”, “inconsecuente”.

Por tanto, anacoluto hace referencia a la incoherencia de una oración por una alteración inesperada en su estructura, por ejemplo, un cambio de sujeto.

Ejemplo de anacoluto
  • El chorizo leonés, quien lo prueba, le gusta.

Esta oración contiene una incongruencia en forma de anacoluto, pues se introduce un pronombre relativo (“quien”) que no corresponde con el sujeto original “el chorizo leonés”).

  • El chorizo leonés, quien lo prueba, le gusta.
  • El chorizo leonés le gusta a quien lo prueba.
Nota 
Vicios del lenguaje: anacoluto

El anacoluto puede describirse como uno de los vicios del lenguaje.

Los vicios del lenguaje son incorrecciones en las que se incurre en el habla cotidiana, pues no se cuida tanto la expresión oral como la escrita.

Otros vicios del lenguaje son:

No obstante, como en el caso del anacoluto, estos pueden usarse de manera intencionada como figuras retóricas.

Además de como parte del habla cotidiana, el anacoluto suele emplearse:

Anacoluto: figura retórica

Si bien no todas las fuentes reconocen el anacoluto como recurso literario, algunas personas consideran que la incongruencia que produce este recurso puede utilizarse para causar sorpresa de manera intencionada.

Además, el anacoluto puede utilizarse en la literatura para indicar que los personajes no hablan de manera correcta, o para dar realismo a su discurso.

Figura retórica: anacoluto
  • El ventero, que no conocía a don Quijote, tan admirado le tenían sus locuras como su libertad.
    Don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes Saavedra

En esta oración, Cervantes utiliza el anacoluto para desplazar la atención del “ventero”, que es el sujeto de la oración de relativo, a “don Quijote”, que es el complemento directo de esa oración.

De esa forma, causa sorpresa al lector a la vez que hace que ponga más atención en las características de don Quijote, “tanto sus locuras como su libertad”.

Anacoluto: publicidad

En el caso de la publicidad, el anacoluto también se utiliza para referirse al recurso de alterar el orden lógico de la realidad.

Esta alteración tiene el objetivo de llamar la atención sobre el producto.

Anacoluto: ejemplos en publicidad
  • Un anuncio de una marca de zapatos que utiliza una imagen de unos zapatos con forma de pies. Se altera la realidad para destacar lo cómodos que son los zapatos de esa marca.
  • Un anuncio de seguros agrícolas usa la imagen de una mariquita con cabeza de hipopótamo. Esa imagen irreal, que no corresponde con lo que se espera ver, llama la atención sobre los peligros de las plagas.

Preguntas frecuentes sobre el anacoluto

¿El uso del anacoluto es siempre intencionado?

No, lo más común es que el anacoluto se utilice por error.

En el habla cotidiana, se tiende a improvisar el discurso a medida que se habla, lo que puede dar lugar a incongruencias.

No obstante, el cambio en la estructura sintáctica que ocurre en el anacoluto, aunque provoque una incoherencia, puede utilizarse de manera intencionada como recurso literario.

En este caso, su objetivo es causar sorpresa o llamar la atención sobre una persona o cosa.

¿Cuál es un ejemplo de anacoluto en la literatura?

El anacoluto puede usarse como figura literaria para provocar sorpresa en el lector o contraponer los personajes. Por ejemplo:

Quien lo contrario dijere, le haré yo conocer que miente. (Miguel de Cervantes Saavedra, Don Quijote de la Mancha)

En esta oración, se cambia el sujeto del pronombre relativo “quien” al pronombre personal “yo”, indicado por la primera persona del futuro simple, “haré”.

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María Correas, PhD

María ha sido profesora de español e inglés en la universidad y en empresa, combinando esa actividad con la traducción, la creación de contenidos, la revisión y la edición, a los que se dedica ahora.